© 2023 AMIT – Web desarrollada por Estudi Llimona

Bioquímica. Investigadora Postdoctoral
Bioquímica. Investigadora en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB) del CSIC. Licenciada en bioquímica por la Universidad Autónoma de Madrid (2003) y doctora en biología, en el Programa de doctorado del departamento de Bioquímica y Biología Molecular por la Universidad Complutense de Madrid (2008).
Desde el año 2004 hasta diciembre de 2015, María Moreno del Álamo fue investigadora en el Centro de Investigaciones Biológicas (CIB) del CSIC. Allí desarrolló su tesis doctoral: “Un motivo clave en la proteína Orc4p para el ensamblaje del complejo iniciador de la replicación en Saccharomyces cerevisiae”, cuyos resultados fueron publicados en el Journal of Molecular Biology en 2010. A partir de entonces comenzó a investigar en otras líneas del grupo, y durante su etapa posdoctoral en el CIB dedicó su labor investigadora a colaborar en el estudio y caracterización de un sistema sintético bacteriano de proteinopatía amiloide. Desde 2016 investiga en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB) también perteneciente al CSIC. “Empezar de cero en el CNB ha sido duro –reconoce María Moreno- pero por lo menos puedo seguir trabajando en lo que me gusta que es la investigación”.
En el CNB investiga el efecto de un sistema toxina-antitoxina sobre la persistencia de las bacterias a los antibióticos y también la relación de una helicasa con los sistemas de reparación del ADN en bacterias gram+. María decidió dedicarse a la ciencia en primero de bachillerato cuando escuchó a su profesor de biología hablar de bioquímica.
«Para casi toda la gente de mi clase era un tema muy árido, no les gustaba nada. Pero a mí me gustó, me entró el gusanillo y decidí hacer la carrera de bioquímica para dedicarme a la investigación científica”. Una profesión en la que no conocía a nadie: “No tenía muchos referentes. Sí, claro que sabía quién había sido Santiago Ramón y Cajal y también sabía quién era Margarita Salas, pero excepto ellos no conocía a otros científicos”.
Estudiar bioquímica le dio la oportunidad de descubrir lo que iba a ser su vida como investigadora, no desde lejos sino desde el mismo corazón del trabajo científico: el laboratorio. “Teníamos la ventaja de que ya durante la carrera estábamos en un laboratorio. No eran una prácticas de dos o tres semanas, eran seis o siete meses compartiendo el día a día con predoctorales y posdoctorales. Eso te daba la oportunidad de saber claramente si te gustaba o no la investigación”. Y a ella le gustó. Tanto que desde entonces es su profesión.

De sus publicaciones, María Moreno destaca la titulada Amyloidogenesis of bacterial prionoid RepA-WH1 recapitulates dimer to monomer transitions of RepA in DNA replication initiation, en Structure (2015), y otra titulada Pre-amyloid oligomers of proteotoxic RepA-WH1 prionoid assemble at the bacterial nucleoid, en Scientific Reports (2015). También es, junto a Rafael Giraldo Suárez, titular de una patente: “Anticuerpo monoclonal para la detección de formas amiloides”. OT P201331391.
Otro aspecto de su profesión con el que disfruta es la oportunidad de dirigir a otros. Ya desde el comienzo de su carrera investigadora posdoctoral tuvo estudiantes a su cargo y una sublínea de investigación que pudo desarrollar desde el principio: “Trabajaba como si fuera una posdoctoral senior”, recuerda. Pero a ella, como a tantas y tantos investigadores, se le cruzó la crisis: “Fue brutal, el laboratorio se quedó prácticamente sin financiación y yo tuve que ir a otro centro, el CNB, y empezar casi de cero. Por eso digo que ha habido momentos muy buenos, momentos malos, momentos muy duros y momentos muy difíciles…” Además de dedicar su tiempo a la investigación, María Moreno está muy interesada en la divulgación de la ciencia. Desde el año 2015 colabora con el proyecto “Apadrina la Ciencia” en la feria Juvenalia que se celebra todos los años en Madrid para acercar la investigación a los niños y los jóvenes y que es una de las muchas actividades que esta plataforma de científicos organiza.
Sobre la situación de las mujeres en la investigación, tiene claro cuando aparecen los problemas:
“No sé si las mujeres lo tenemos más difícil o no pero creo que es el momento en el que decides tener familia cuando empiezan los problemas. Desde pequeños nos han dicho que se puede conciliar la vida laboral con la familiar pero la verdad es que es bastante irreal. Para una mujer es muy complicado. No puedes llegar a todo. Necesitas dedicar el 100% a la familia y el 100% a la investigación, y claro eso es imposible, así que no llegas y te desesperas”.
María Moreno del Álamo es socia de AMIT desde el año 2004. “Fue mi director de tesis el que me habló de la asociación. Entonces la presidenta era Flora de Pablo, ella estaba muy cerca de nosotros y decidí entrar”. En estos años, María Moreno destaca que quizá lo que ha echado de menos en AMIT es “una mayor atención a las investigadoras más jóvenes, las que están empezando o las que llevan poco tiempo haciendo este trabajo”.