Nuria Vilaboa

Investigadora Senior

Hospital Universitario La Paz
Doctora en Farmacia
Universidad Complutense, 1989 (Lugo, 1965)

Licenciada y doctora en Farmacia por la Universidad Complutense.

“Cuando acabé la carrera estuve un año que no sabía bien por dónde seguir. Luego decidí hacer la tesis. La hice en el Centro de Investigaciones Biológicas del CSIC en Madrid. Estuve trabajando en unas proteínas que en aquel momento estaban muy de moda, las proteínas de choque térmico o proteínas de estrés. La verdad es que el tema me gustó mucho”.

La llegada de Nuria Vilaboa a la investigación no fue inmediata:

“Me gustaban las ciencias de la vida pero no al punto de estudiar medicina, no me veía con vocación. La carrera de biología yo la imaginaba en aquel momento más de bota que de bata. Farmacia me parecía una carrera interesante porque estudiabas farmacología, fisiología, también bioquímica y microbiología. La verdad es que cuando me inscribí en Farmacia no tenía interés en poner una oficina de farmacia pero sí me atraía la carrera en sí misma, es una carrera muy completa”.

A pesar de que la investigación hubiera debido parecerle una opción lógica, la falta de información o de referentes hicieron que no fuera así:

“Lo que nunca me vi a mi misma durante la carrera fue como investigadora, ni siquiera cuando acabé pensé que yo podía ser una científica. Tenía un buen expediente pero no se me ocurrió que podía buscar trabajo en un laboratorio, hacer una tesis… Entonces en la universidad había muy poca información sobre cómo seguir… Cuando acabé pasé un año en el que estuve haciendo cosas variopintas. Yo sabía que no quería ser comercial, que era una salida que muchos de mis compañeros habían tomado. Pero también fue una época rara porque había muchísimo paro. En COU lo que me decían era que la universidad era una fábrica de parados, así que al terminar la carrera estaba tan asustada como desorientada. Lo de hacer la tesis surgió porque al tener buen expediente, me llamaron investigadores que igual tenían un proyecto y les habían concedido un becario. Y fue así, a través del teléfono, cómo descubrí que había un buen número de grupos haciendo investigación”.

En 1995  al acabar la tesis Expresión de genes de estrés y de proteínas de filamentos intermedios en células leucémicas mieloides humanas, Nuria Vilaboa decidió hacer una estancia en Estados Unidos en el Department of Biochemistry and Molecular Biology, School of Medicine, University of Miami, con Richard Voellmy, especialista en choque térmico, un asunto muy relacionado con la tesis que ella había hecho.

“Estuve allí tres años. Mi tesis la había enfocado hacia biología celular y en su laboratorio me formé en biología molecular, dentro del mismo tema, estudiando la expresión de las proteínas de estrés en células humanas. Después de tres años de estar allí aunque estaba muy a gusto y me hubiera quedado más tiempo, decidí volver  porque también quería empezar mi vida en pareja, mi marido no es investigador y tenía su trabajo aquí. Me reincorporé al laboratorio donde había estado haciendo mi tesis y allí estuve, en el CIB con el mismo grupo, durante un año y medio”.

 

Raquel Castejón, Jesús Mingorance, Antonio Martínez, Nuria Vilaboa y Rocío Ruiz, en el hospital La Paz. (foto de Fernando Sánchez)

En 1999 se trasladó al Instituto de Investigaciones Biomédicas del CSIC-UAM a hacer otra estancia postdoctoral en el laboratorio de Carmela Calés:

“Cambié un poco de tema aunque era ya una posdoctoral senior y llevaba en la mochila mis proteínas de estrés y asuntos relacionados con el calor. En 2001 tuve un hijo y justo cuando nació me concedieron un contrato de investigación Miguel Servet en el Sistema Nacional de Salud, me vine al Hospital  Universitario La Paz a intentar formar mi propio grupo y aquí estoy desde entonces”.

Nuria Vilaboa dirige un grupo en el Instituto de Investigaciones Sanitarias IdiPaz y otro grupo en el Centro de Investigaciones Biomédicas de Biomateriales, Bioingeniería y Nanomedicina (CIBER-BBN):

“He tenido que adaptarme en cuanto a que me incorporé en el Hospital para dar apoyo a la investigación que se hacía en traumatología, en concreto en biomateriales implantables, y para eso me tuve que reciclar, aunque siempre canalizando los conocimientos previos que tenía. Lo que intentamos en nuestro grupo es manipular la respuesta de choque térmico  con el fin de favorecer la regeneración del tejido óseo. Para ello utilizamos distintas aproximaciones tecnológicas  que nos permiten incrementar de forma deliberada la temperatura del tejido, con el fin último de sobreexpresar factores de crecimiento terapéuticos”.

En cuanto a los trabajos más importantes entre las publicaciones de las que es coautora, Nuria Vilaboa destaca dos: Novel gene switches for targeted and timed expression of proteins of interest (2005) en Molecurar Therapy y New inhibitor targeting human transcription factor HSF1: effects on the heat shock response and tumor cell survival (2017) en Nucleic Acids Research.


Bibliografía