El pasado 14 de marzo, conmemorando la Jornada del «8 de marzo», AMIT-cat organizó este encuentro en el que se presentaron algunos de los resultados del proyecto interuniversitario GENERA. Tres de las investigadoras que han participado en el proyecto, además de la Investigadora Principal, Ana González, compartieron su investigación de forma amena, mediante charlas cortas, de unos diez minutos, y en un contexto informal, como es el de La Monroe, el bar de la Filmoteca de Catalunya. Las charlas fueron:
- «Mi vida es una hoja de excel» por Ester Conesa Carpintero
- «Cuatro trucos para salir airosa de un proceso de selección postdoctoral» por Agnès Vayreda Duran
- «Modelo incubadora: Creando bebitos de ciencia» por Beatriz Revelles Benavente
- «…Y no olviden super mineralizarse y vitamizarseee» por Ana M. González Ramos
Posteriormente a las charlas algunos temas fueron motivo de debate como:
- El formato de excelencia que se fomenta desde las instituciones vinculadas a la investigación (universidades, institutos de investigación, administración), promocionando la producción científica y su excesiva cuantificación a través de unos indicadores, que no siempre reflejan la calidad, y sin tener en cuenta los aspectos más subjetivos vinculados a las trayectorias personales.
- Se reconoció que ha habido mejoras en la manera de construir la carrera científica, pasando de una organización feudal a una neo-liberal, siendo esta última mejor que la anterior, es de todas formas muy cuestionable ya que aplica una estructura empresarial, de riesgo-beneficio, en un ámbito como el de la investigación que no siempre avanza bajo estos supuestos.
- Hubo controversia sobre la incorporación de aspectos más subjetivos en la evaluación de las investigación y de las investigadoras, se comentó que a las mujeres nos va mucho mejor en aquellos ámbitos donde los procesos de evaluación muy pautados y más objetivos (oposiciones a la judicatura, pruebas del MIR….), si incorporamos aspectos más subjetivos volveremos atrás y nosotras seremos las primeras que saldremos perdiendo.
- Otro aspecto que también emergió en el debate fue la necesidad de poner en valor el trabajo colaborativo, presente casi siempre en los progresos de la investigación y no reforzar tanto los éxitos individuales.






